29 de diciembre de 2008

Un año que se va...

Sí, este año ya se acaba. Ha sido el año en el que me habéis conocido a través de mis palabras… y del mismo modo quería describir este 2008 que nos deja, con palabras, con frases, con letras… Al menos lo voy a intentar.

Lo más emocionante: Supongo que cualquier momento de mi verano particular… son momentos únicos, divertidos, pero sobre todo emocionantes…
Lo más emotivo: Pues seguramente alguna película que me hizo soltar la lagrimilla durante este año: recuerdo de manera especial: Las tortugas también vuelan, La milla verde y La tumba de las luciérnagas.
Lo más doloroso: Asumir ciertas realidades de tu vida que siempre cuesta aceptar. Es doloroso por un lado, pero todo pasa… Pero gracias a Dios, ha sido un año en lo que los momentos dolorosos han brillado por su ausencia. Ojala siga así por mucho tiempo.
Lo más sorprendente: Que hay cosas que nunca cambian, y lo creáis o no, me he dado cuenta de ello este año. Que hay personas, y momentos de tu vida que siempre están ahí, o que tarde o temprano vuelven… y es algo que me alegra pero que no deja de sorprenderme.
Lo más divertido: Cualquier momento de risas con amigos, cualquier fiesta del verano, múltiples excursiones y viajecitos a lo largo de este 2008, momentos recientes disfrutando de la nieve, las fiestas de navidad que tanto me gustan…
Lo más triste: Perder algunas amistades, o sino perderlas, distanciarse de ciertas personas a las que aprecio mucho… pero que por causas aún desconocidas me han olvidado.
Lo más preocupante: Que en muchos aspectos, sigo sin saber que hacer con mi vida.
Lo más feliz: Lo primero la salud… Estar bien contigo mismo, con tu familia, tus amigos y la gente que te rodea. Seguir bien, ver que todo sigue igual, que aunque los años pasen la gente que quiero y que me quiere sigue a mi alrededor, y los que verdaderamente importan están ahí. Para mí es lo más importante para tener la felicidad.
Lo más coñazo: Los exámenes! Los febreros, junios y septiembres de estrés! Los trabajos, informes, prácticas y proyectos que me asedian en la facultad! El plan Bolonia que está por llegar… ufff… que me pongo malo por momentos…
Lo más extraño: Pufff, no sé, hay tantas cosas raras en mí, en mi vida, que no sabría por donde empezar…
Lo más inteligente: Saber aceptar ciertas etapas, esos puntos de inflexión a los que llegamos en nuestras vidas… poder evolucionar a la par que los sentimientos, no dejarse llevar por los demás, por ciertas situaciones que nos llevarían a otras más incómodas… Eso sería lo más inteligente, no sé si lo he sabido hacer del todo, o no…
Lo más curioso: Pues ver la evolución de mi blog Yopopolin & reflections que en escasos días cumple su primer añito. Empezó de forma humilde, y poco a poco ha ido creciendo. Me ha servido para expresarme, para evadirme, para contar mis cosas, o para no contarlas. Para dejar plasmada una vida… que era de lo que se trataba. Para ver como hay gente al otro lado, que sigue lo que cuentas cada día. Para comprobar que puedes reírte, emocionarte, sorprenderte, leyendo otra vida, cada una de las vuestras… No sé, tener este blog, me llena de orgullo y satisfacción… como diría J.C.

Bueno, pues salvo algo excepcional está será la última entrada del 2008. Pero aquí estaremos el próximo año dispuestos a seguir dando guerra…
Os deseo lo mejor para este 2009, que espero sea un año de alegría y felicidad para todos. Haced memoria, un pequeño repaso en vuestra mente de este año que se va, y completad este sencillo meme, para recordarlo como se debe. Y para empezar con buen pie el nuevo año.

¡Feliz 2009!

26 de diciembre de 2008

Dulce y corta Navidad...



Parece que no hemos ni comenzado con las fiestas navideñas, y si lo pensamos fríamente, en realidad, ya se están yendo… Es lo malo de la Navidad: que la esperas, la ves venir lleno de ilusión, y al final, la dulce Navidad, se escapa, llega el día 26, con resaca… y luego el 27, las inocentadas del 28… aún no te has dado cuenta y ya acabó el año… comienzas uno nuevo, vienen los reyes magos de oriente, comes roscón…. Y hasta ahí. Se acabó. La navidad, se esfumó…

Estas fechas se pasan volando. Y al final, albergas una mezcla de sentimientos en tu interior un tanto extraña. Alegría y júbilo por los entrañables momentos que vivimos… y por otro lado, y en mi caso este año más que nunca, la nostalgia, la sensación de que lo vas viendo todo pasar a la velocidad de la luz. Intentas pararte a disfrutar pero no te da ni tiempo. Es como esas películas de viajes por el espacio, en la que ves el infinito pasar ante tus ojos, pero no llegas a distinguir lo que ves…

No sé, es raro. Además, con la cantidad de cosas que tengo y debo hacer, no me apetece hacer ninguna. Es que no quiero… ni me preocupa…
Sólo me he dedicado a dejar pasar el tiempo, a vivir la Navidad todo lo que he podido, y a ver a gente y amigos, que hacía tiempo que no veía… Pero me temo que va a llegar el día 6 de enero, y me invadirá la melancolía, al pensar que no he aprovechado el tiempo lo suficiente. Me reconcomerá la culpa por dentro, al ver la cuesta de enero que me espera con jornadas de trabajo interminables… y pensando en el ayer, e imaginando el mañana… me sentaré a esperar una nueva Navidad.

Por eso, sólo me queda desearos lo mejor a todos, pensad en el hoy, en el presente, y disfrutad de la actual Navidad, ilusión… Yo intentaré hacer lo mismo… No prometo nada…

22 de diciembre de 2008

El día de la salud

Llego el día, y ya pasó el sorteo, y la resaca de celebraciones televisadas. Todo un clásico navideño como los mazapanes y el turrón. Mis felicitaciones a todos los premiados… pero yo un año más, me voy con las manos vacías (en cuanto a premios gordos se refiere) porque al menos la pedrea me consuela este año, ya que uno de mis números salió en la cantinela de los 1000 eeeeeuuurooos!
Pero eso es lo de menos, lo importante es tener salud, y el día 22 es lo más repetido allá donde vayas… y con toda la razón, he de decir…

En cuanto al Gordo de este año… pues que jamás lo hubiera comprado aunque pasara todos los días por delante de la administración donde se vendiese. No me gusta el número, 32365, de estos números que ni frío ni calor, que no es ni bajo, ni alto, no tiene nada de especial, pero mira tocó! Y es que, al final, todos los números están en el bombo…
Así que, sólo me queda desearos muy buena salud a todos, que es lo que cuenta. Os dejo con el momentazo!!

Feliz navidad!!

20 de diciembre de 2008

El regalo perfecto

Esta mañana fui de compras navideñas… Me aventuré a salir en busca del regalo perfecto, como decía El corte inglés hace un par de navidades…Y qué difícil es, coño!

Me he recorrido todo el centro de la ciudad en busca de regalos: ropa, complementos, zapatos y chorradas varias, para mi familia y amigos. Y al menos la compra fue productiva porque ya tengo dos regalos finiquitados; pero aún me quedan unos cuantos días por delante, y muchas cosas que comprar. Me queda por recorrer El corte inglés, y los centros comerciales, donde miraré sobre todo cosillas de electrónica, música y ocio, y pequeño electrodoméstico en general, muy recurridos en estas fechas… así que, no está todo hecho.

Pero hoy, por las tiendas de ropa del centro y zapaterías varias, como os digo… no cabía un alma! Vale que no había el mismo número de personas en un Zara, que en Purificación García (que no entré, pero estaba desolado). El caso es que la gente se apelotona en tiendas como Zara, Springfield, Blanco, Mango, etc., pero luego cuando entras en una zapatería de las de toda la vida, te atienden con su mejor sonrisa porque únicamente estás tú, y alguna anciana que entró a comprar el pan por error. Qué le vamos a hacer… así es el capitalismo. Pezqueñines no.

Y si ahora está así, no quiero pensar en las rebajas! A veces me pregunto dónde esta la crisis… ¿No os lo habéis planteado durante todos estos meses, en alguna ocasión? Yo hoy me lo volví a decir a mí mismo, cuando veo a la gente comprar y comprar… y es que la crisis debe ser como la procesión, que va por dentro…
Vale, que sí, que está claro que crisis hay… y tenemos muchos ejemplos de ello. Pero también veo situaciones que me hacen pensar que no es tal… o que ha llegado un momento, que la gente dice: de perdidos al río...

Bueno, que me desvío, volviendo al regalo perfecto, he de deciros que es muy difícil encontrar un detalle para todo el mundo. Hay personas que lo tienes muy claro, pero otras por más vueltas que le das… nada. Pero al fin y al cabo, lo que cuenta es el detalle… y estoy deseando que llegue el momento de entregárselo a cada destinatario y ver cuánta ilusión les hace, o no…
Ah, se me olvidó comentar que esta entrada sólo podía ser leída por los que sepan que Santa Claus no existe… upss! Espero que no lo lea ningún niño…

16 de diciembre de 2008

Crónica de la nevada

Así, con articulo definido y todo. Porque lo que cayó ayer en León, se lo merece. No fue un poco de nieve y ya, fue “la nevada”. Y la mejor forma de comprobarlo es echarle un vistazo a como estaban los coches ayer… Estuvo nevando de forma copiosa, incansable, durante la noche del domingo y toda la mañana de ayer, y el resultado: una nevada histórica! Hacía ya muchos años, y yo casi ni me acuerdo, que no había por las calles de la ciudad 30cm de nieve, centímetro arriba, centímetro abajo… Simplemente increíble.

Ayer seguramente os acordaríais de mí. Lo mismo al ver en el telediario la catedral de León, o los titulares en los que decían que la autopista AP-66 era una ratonera, dijisteis “Coño! Yopopolin!” (o Yopo, para los amigos) Que para una vez que salimos en el parte, como dice mi abuela, sea por ésto… tiene narices. Pero es que en la autopista del Huerna, que une León y Asturias, quedaron 600 personas atrapadas por la nieve… si hasta tuvo que intervenir el ejército! Lo nunca visto… Me parece bien que el ejército venga a sacar a 600 personas desesperadas en una autopista, sin salida, donde no se puede ir ni adelante, ni hacia atrás, ahí viene de perlas la ayudita… pero que tengan que venir a echar una mano en la limpieza de las calles de la capital… eso ya me parece excesivo… ¿Qué es, que el ayuntamiento no estaba preparado para semejante cúmulo de nieve? La respuesta es no… Pero si hasta se llegó a recomendar el uso de cadenas para transitar por la ciudad! No hubiera sido mejor, más efectivo, trabajar durante toda la noche del domingo para que los efectos de la nevada fuesen los mínimos el lunes por la mañana… pues me consta que no fue así. Las medidas se tomaron tarde, mal y nunca el lunes por la tarde, y aún hoy las calles son un peligro, que he estado a puntito de caerme un par de veces… En fin, es lo que nos toca, por vivir en el norte.

Así que eso, ayer un caos monumental salir de casa. Estaba todo repleto de nieve y no se podía transitar… e incluso se suspendieron las clases en toda la Universidad de León (En el campus de León, y en el de Ponferrada creo que también…) Lo dicho, lo nunca visto. Jamás en mi vida me habían tenido que suspender las clases por una nevada acaecida en la capital. Nunca, ni en párvulos, ni en primaria, jamás. Y ahora en la facultad, es cuando ocurre. Oye, que yo encantado, que además me vino divinamente para repasar el examen que tenía hoy, que ya está hecho, y espero que aprobado… Así que no me quejo, pero aún sigo creyendo que lo de suspender las clases no lo hicieron por nosotros, los alumnos… sino por los pobres profesores que se desplazan todos en sus cochazos, y viven en las zonas residenciales de las afueras, donde evidentemente más problemas había…

No os tengo mucho más que contar… seguramente los que no vivís nunca entre la nieve estaríais deseando que cayera una de éstas en vuestras ciudades… pero creedme, que los efectos colaterales, son mas bien negativos. Es muy bonito ver la nieve, pasártelo en grande con ella… pero aquí, en la ciudad, no os podéis imaginar lo sucio, y lo molesto que puede llegar a ser… Así que, me gusta que nieve, pero no tanto… Los que nos toca una nevadita año sí, año también, (aunque no tan fuerte como la de ayer) estamos acostumbrados, pero al final estos días post-nieve se te hacen pesados, por aquello de ir caminando como si pisaras huevos por las aceras heladas, para no caerte; por los coches que pasan a gran velocidad y te salpican con los restos de la nieve sucia; por las goteras que te van cayendo sobre la cabeza por el deshielo… y por otras tantas cosas…

Al menos ahora ya sabéis la parte negativa de una gran nevada… aunque siempre es mejor quedarse con lo bueno, con las estampas blancas, con los copos de nieve cayendo al otro lado de la ventana, con los muñecos con nariz, ojos, y boca en las aceras... en definitiva, con la parte bonita: el manto blanco que lo cubre todo por unos días…


14 de diciembre de 2008

Seré inmortal...

Nunca os habéis planteado, que si fuéramos inmortales, muchas cosas no tendrían sentido… ¿No os lo habéis preguntado?
Fijaos a lo que me dedico a pensar en época de parciales… Es momento de reflexiones y desvaríos filosóficos, y es que es cuando más teorías fructíferas llegan a mi mente, cuando tengo mucho trabajo, estudio, estrés… Cuantas más cosas tengo que hacer, más vueltas le doy a la cabeza, a nimiedades, a cosas absurdas muchas veces, pero que acaban siendo dignas de figurar en un post como este.

El caso es que si fuera inmortal posiblemente no estaría estudiando ahora mismo… ¿no os parece? Eso entre otras muchas cosas…
Si fuésemos inmortales, nuestra vida cambiaría, porque sabríamos que nada nos afectaría, que todo lo que nos ponga en peligro lo superaríamos, por muy terribles consecuencias que pudiera tener… Por un lado sería maravilloso vivir de por vida (qué juegos de palabras me gasto, ehh…) sería un sueño, el saber que podríamos disfrutar de este regalo llamado vida por siempre, pero la palabra siempre dotada de un nuevo significado: la inmortalidad.
Vale sí, por un lado sería estupendo, pero por otro, no valoraríamos la vida todo lo que ahora lo hacemos… porque de algún modo no tendría ningún sentido… no sería vivir, sino dejar pasar el tiempo… ir conociendo a gente, amando, sintiendo, y viendo pasar a todos a tu alrededor… sin ningún horizonte, sin ningún fin.

Así que, si pudiésemos elegir, mejor nos quedamos como estamos, ¿no creéis? Si me dan otro poder, ya me lo pensaría…
Prometo dejar de preguntarme estas cosas… y menos en tiempos de estrés… Pero todo me vino a la cabeza con la canción “Inmortal” de La oreja de van Gogh, que no sólo me hace pensar como veis… sino que me revitaliza, me pone las pilas, está cargada de vida…

Tengo escrito en un suspiro, aquellas palabras que nunca dijimos…
…seré inmortal, porque yo soy tu destino…

9 de diciembre de 2008

De puentes reducidos...

He estado unos cuantos días desaparecido, lo sé, y la única razón de ello es el puente… Sí, amigos sí, un puente de tres días, pero al fin y al cabo puente. Un puente además, en el que tenía que haber aprovechado para hacer cientos de cosas… pero al final se quedó en nada como siempre… (¿Y cuántas veces he dicho puente?) Pero aunque en el ámbito estudiantil no hice casi nada, al menos me sirvió para desconectar un poco… y tampoco es que hiciera nada en especial, pero hice muchas cosas… no sé si me explico, porque parezco la paradoja con patas…

Bueno, pues como suele ocurrir, prometes muchas cosas de cara a un puente, del tipo de “a ver si empiezo el informe de…” “me tengo que poner a estudiar el próximo parcial…” “a ver si adelanto algo del proyecto de…” pero al final nada. El caso, es que algo del proyecto si que hice, pero por cumplir y decir que por fin me he puesto… Y estudiar otro tanto de lo mismo… puedo decir que empezar, empecé, aunque sean sólo tres miserables folios…

He visto mucho cine… en la pantalla grande fui a ver Bella… y me esperaba más, la verdad… me la habían puesto por las nubes, y se queda en una historia normalilla con un mensaje anti-abortivo demasiado intenso para mí… pero bueno… Lo peor fue que casi se muere una mujer en la sala del cine, la tuvieron que sacar en volandas porque le dió un síncope o similar, ¡qué susto! Al parecer no fue nada… pero jamás me había ocurrido algo así…
También vi Noviembre dulce (ésta ya en dvd) que no había tenido la oportunidad, y está bastante bien… bonita historia romántica, y una gran Charlize Theron. Y por último Osama, cine asiático notable, que fue la que más me sorprendió de todas… Bueno, no os quejaréis de las recomendaciones y no recomendaciones de cine…

También hubo fiesta, menos de la que hubiera querido, porque siempre me venía a la mente eso de “tengo que madrugar mañana, a ver si estudio algo” ya sabéis, un lema que nunca se cumple, no sé por qué sigo creyendo en mí mismo, y en mi voluntad para levantarme temprano a estudiar… tenía que estar curado de espanto… pero no! Todo esto, no sin antes ir de tapeo por la ciudad de León, que por si aún no lo sabíais es el deporte oficial de la provincia. La verdad es que no sé si os lo había comentado algún día, pero León es, junto con Granada (y corregidme si me equivoco) la única ciudad española, en la que al ir de cañas, vinos, cortos o lo que queráis, te ponen la tapa o pincho gratis… aquí de toda la vida se llama tapa, de ahí lo de tapeo, evidentemente… Y qué ricas están las tapas de por aquí! Y qué cantidad te ponen por el módico precio de un corto… pues eso, cuando os paséis por aquí, imperdonable no ir de tapeo. Queda dicho…

Y como menos estudiar, de todo… dediqué el día de ayer a ir de compras buscar cosillas para regalar… hay que tomárselo con tiempo… y ya que estaba todo abierto (y petadísimo por cierto) pues allá que fui. Regalos no compré, pero no me vine con las manos vacías, porque aproveché para renovar mi móvil, que aunque tenía un año escaso, me apetecía darme un capricho gracias a una promoción de Vodafone (que me pone, como dice una amiga mía, y sólo tiene gracia si pronunciáis Vodafone y no Vodafón) y me he comprado un teléfono, desde el que podré actualizar el blog!
Así que, no os libráis de mí… ni con puentes reducidos de por medio…

4 de diciembre de 2008

A diciembre...

Mi blog nació en enero de este año, y por tanto nunca he tenido la oportunidad de hablaros de diciembre, en diciembre. Con esto quiero decir, o más bien corroborar, que acabamos de entrar en el mes del año preferido por mí, el mes que más me gusta. Así que esta entrada va dedicada a ti, diciembre. Al último mes del año, y para mi el mejor.

Siempre ha estado en la balanza, de un lado agosto, y del otro diciembre. Y en algunas épocas de mi vida la balanza se inclinó del lado de agosto en cuanto a preferencias mensuales se refiere… pero ya hace unos cuantos años, que diciembre, es y seguirá siendo, especial. Lo que lo hace especial, a parte de hechos importantes de mi vida que han acaecido en este frío mes, es lo que ya muchos estaréis imaginando: la Navidad. Pero también es distinto, porque empieza el invierno, se acaba el año… no sé, es un mes con muchas cosas especiales… Pero la Navidad… es que es una época que me encanta! Y la celebración que más disfruto, la que más ansío que llegue. Son las fechas, en las que más me divierto con familia y amigos, saboreo la compañía de los que más quiero, de los de veras, de los que siempre están ahí. Es la Navidad la época de las ilusiones en la cara de los niños, de las luces en la calle, del resplandor en los rincones de la ciudad, que suenan a villancicos y huelen a turrón. Es tiempo de redecorar tu casa y tu vida, de dejar a un lado preocupaciones, y rendirte al regocijo, de olvidar el pasado y vivir el presente; es una etapa de acercamientos, de vuelta a empezar. El mejor momento para cambiar, para retomar nuestras vidas por el mejor camino.

Todo lo que conlleva este mes me fascina. La única parte mala de diciembre, quizás sean los parciales. Sí, siempre caen los parciales en esta época. Ayer mismo tuve uno que me salió bastante decente… así que de momento diciembre cumple mis expectativas. Me queda otro examen el día 16, así que con calma… Y lo demás son todo puntos positivos y/o ventajas (me gusta meter los y/o aunque no vengan a cuento, es pro… ¿algún problema?).
Porque diciembre significa puentes, el de la Constitución (aunque este año sea reducido…) significa vacaciones de Navidad para nosotros los universitarios, y demás estudiantes varios. Diciembre significa fiestas por doquier, significa reencuentros con la gente a la que quieres… significa cenas y comilonas de postín… En diciembre, te pones a buscar regalitos para tus allegados, y también hay sorpresas que recibir. Detalles que igual no tienen gran valor, pero que significan mucho para ti. Yo he de decir que casi me gusta más regalar, que ser regalado. Me encanta eso de recorrerme tiendas buscando el regalo perfecto para aquel o el de más allá. Me chifla ver la cara que pone la gente cuando lo desempaqueta… pequeñas cosas que a mí me hacen feliz… Y de eso se trata la Navidad, de ser felices.

Así que, a todos los que améis diciembre, a los que os guste la Navidad, el frío invernal, a los que tenéis vacaciones, a los que os reencontráis con vuestra gente, a los que volvéis a casa por Navidad, a los que disfrutáis adornando vuestra casita, comprando regalos para vuestros seres queridos, a los que os encanta ver la llama de ilusión encendida en las miradas, a todos vosotros, va dedicado también este post. A los demás, siempre os quedará vuestro mes favorito del año… ese que aún está por llegar. Pero estas líneas, van por diciembre: por fin, inmersos en él…

1 de diciembre de 2008

De centollos asturianos...


Vamos a comenzar el mes, con la entrada educativa de turno, todo un clásico en este blog. ¿Sabéis lo que es una cetárea o cetaria? Si aún no conocéis este término, no os preocupéis, yo os lo explico… Os doy una pista: de centollos asturianos va la cosa…

El pasado
viernes nos fuimos de visita didáctica a Gijón, (y de ahí lo de asturianos…) una visita express de escasas horas, para conocer en vivo y en directo una cetárea. ¿Y qué es una cetárea? Pues ya os hubiera puesto el enlace de la Wikipedia si esta palabra apareciese, pero no es así, por tanto, intentaré contarlo yo mismo, e igual me animo a editar dicho vocablo en la Wikipedia, por qué no…
Una cetárea es un lugar donde se mantienen crustáceos y/o moluscos, desde que se pescan hasta que se comercializan. Al contrario de lo que mucha gente piensa, no es un criadero de crustáceos, simplemente mantienen los centollos, bogavantes o las nécoras, en condiciones óptimas hasta que se distribuyen a los puntos de venta. Según nos contaron, en este lugar se mantienen como mucho una semana, en una especie de piscinas con agua totalmente controlada, pero marina, que luego se devuelve al Cantábrico, cuando los animales están listos para envasarse y distribuirse. Como os digo, pudimos ver cigalas, bueyes de mar, cangrejos y centollos, pero no mecánicos. Y ahí es cuando me acorde de mi amigo bloguero Centollo (mecánico, esta vez sí)
Pues ésto es lo que da de sí una cetárea… al menos, para cumplir eso de “no te acostarás sin saber una cosa más”…

La cetárea a la que nos llevaron esta situada en el Musel de Gijón, lo que viene siendo el puerto, lugar en el cual yo ya había estado hace unos cuantos años, pero sigo sin recordar a qué narices fui entonces.
Aproveché para hacer unas fotillos del puerto, mientras nos dirigíamos a la lonja, donde al parecer, se encuentra el único lugar para tomar un café del Musel, aunque este dato no está confirmado. Nos adentramos en “La taberna de la lonja” un bar de pescadores, que emoción!! Y sí, pescadores y marineros debía haber, pero el sitio era como otro cualquiera.
La anécdota fue que hablábamos de comprar lotería, y en cuanto vi ese cartelito reconocido por todos de Hay lotería de Navidad” me dije: pues voy a comprar, que la lonja es de esos sitios humildes y característicos, en los que la suerte cae de cuando en cuando, ¿y por qué no va a ser este año?…
Cual fue mi sorpresa, que cuando le pedí dos décimos a la amable camarera, me dijo: “No me queda lotería, la próxima semana me llega más” Ay, diosito, que me quede como estoy! Como oiga el día 22 que tocó el gordo en la lonja de Gijón, me puede dar un mal…

Pues esto es todo amigos, no diréis que no aprendéis y os divertís a partes iguales en mi blog, ehh! ¡Qué variados y diversos que son mis post, coño!
Nos vemos en el próximo puerto!

27 de noviembre de 2008

Otoño en la montaña

Este fin de semana pasado, estuve de nuevo en mi hábitat natural: la montaña. Y siempre he dicho que el verano allí es especial, y también la primavera, como ya os he contado aquí con anterioridad… pero definitivamente, me gusta más con frío, como ahora en otoño, o aún mejor en invierno…

El domingo no nevaba en la montaña, estaba a punto de llegar el temporal de frío y nieve, que me consta que ya esta allí, inundando las calles con un manto blanco.
¡Qué bonito! y qué especial es ese ambiente gélido de la montaña. Sí, me gusta. Lo mejor de todo es el frío, que a parte de meterse hasta en los huesos, te hace respirar un aire más puro que nunca… un aire congelado, pero que te purifica de arriba a abajo. Y esa sensación de ir con ocho capas encima, recorriendo las calles mientras el frío te corta la cara y el aliento… me encanta! ¿Me estaré convirtiendo al masoquismo? No creo…

Lo bueno de todo esto, es que aún es otoño… así que, os podéis imaginar como es el invierno en la cordillera cantábrica… Cuando me anime a ir, y esté físicamente preparado para soportar temperaturas de diez bajo cero (o más...), os lo contaré. ¿Y cómo es el otoño en la montaña? Os estaréis preguntando… porque es lo que os venido a contar, al fin y al cabo. Pues el otoño en la montaña es muchísimo peor que el invierno en cualquier parte de la mitad sur de la península. Bueno, tampoco os he descubierto nada nuevo.
El otro día, hacía relativo buen tiempo, al menos hacía sol, pero aún así teníamos cero grados. No se estaba mal… a pesar del viento.

Cada vez que vuelvo allí, siempre intento pisar de nuevo por los caminos de tierra, saltar los charcos, subir cuestas interminables, cruzar arroyos, correr por el campo… y esta vez no iba a ser menos. Los paisajes que descubrí este fin de semana, eran tan bellos como siempre… lástima que no pudiera retratarlos
todos, porque se me hizo de noche, y la falta de luz me obligó a
volver a casa. Me gusta pasear por los montes en soledad, alejado del escaso ruido del pueblo, imaginando lo que me espera en cada curva del camino: un ciervo, una liebre, o una ardilla encaramada a la rama de aquel árbol. Me cautiva pensar que estoy solo en ese micromundo, cosa nada difícil de imaginar, por cierto. Me encanta tener todo el aire para mí, toda la tierra a mis pies, los árboles desnudos en el horizonte, y nada que me perturbe, salvo el relinchar lejano de los caballos…

23 de noviembre de 2008

Ángel caído

No soy un Ángel, aunque siempre me han llamado así. Y a mis 37 años, no tengo nada más en la vida que no sea a ti, no tengo ninguna aspiración, nada más que hacer que no sea vivir encerrado en esta habitación.
Como bien sabes, no soy un triunfador, nada más lejos de la realidad, soy todo lo contrario, desde aquel día en que no sonó el despertador…Y aunque todo ésto ya lo conoces, te voy a contar mi relato de supervivencia, quiero que sepas como yo lo viví, como he llegado hasta aquí. Te voy a contar mi historia, la de una vida sin vida, la de un hombre sin destino, la de una persona sin sentido, la historia, de un ángel caído.

Todo empezó aquel día de verano de hace 20 años, en el que mi vida cambió. Seguro que lo recuerdas como si fuera hoy. Hasta entonces, yo era un chico modelo: buen estudiante, educado y respetuoso, todo lo que una madre podía desear. Nuestra familia no era ejemplar, pero sabes que siempre nos quisimos mucho, a nuestra manera. Nunca ha sido fácil ser el mayor de cuatro hermanos, y más si todo lo que te rodea son mujeres… era un caos vivir con tres hermanas, con el eterno anhelo de una figura paterna, y cuidando de las niñas hasta que estuvieron creciditas. Pero llegó un día, en que todo lo de mi alrededor me dio igual.

Ese fatídico día no me desperté. Para mí, era el día en que comenzaría a realizar mis sueños. Me tenía que levantar muy temprano, para llegar puntual a mi cita. Pero el despertador no sonó nunca. Ese fue el comienzo del fin, de nuestro fin.
Cuando abrí los ojos, bien entrada la mañana, pensé que era una pesadilla, pero no, el tiempo había pasado y yo seguía en la cama, ¡ni siquiera mi madre me había despertado! pensaba yo… el día más importante de mi vida… Y no pude presentarme a mi cita. Y jamás lo haría… Había perdido mi oportunidad, y había dejado escapar el momento de hacer la selectividad.
Aquel día de junio maldije todo lo habido y por haber: al despertador, al sueño, a los nervios, incluso te maldije a ti, mamá, en la que siempre había confiado, y que ahí me fallaste, o al menos eso es lo que pensé en aquel momento.
Desde ese día nada fue igual. Tú y yo apenas hablábamos, ambos sabíamos que había ocurrido algo inexplicable entre nosotros, la pérdida del vínculo que nos unía, y que ya no estaba… Dejamos de lado las frases para pasar a los monosílabos… Y así, desde ese día, nunca volvió a ser lo mismo.

Ese año pasó en blanco, sin nada que hacer, sin nada que decir. Mi habitación se convirtió en un fuerte del que no quería salir. Pasaba noches llorando, sin saber exactamente porqué, supongo que por aquel día en que todo se truncó, por los días que le siguieron, porque no hablaba con nadie, y porque veía que todos cumplían sus sueños menos yo.
Se convirtió en rutina, el salir de mi habitación cuando la casa estaba vacía, y cuando había gente me sumía en mis lecturas, mi música, mi cama, mis cuatro paredes.
Llegó junio de nuevo, y otra oportunidad de hacer la selectividad pasó, como un año atrás, y como en septiembre anterior. Hice oídos sordos a unos consejos que no quería, y ni siquiera me planteé retomar los estudios para esta vez intentar cumplir mis sueños. Todo eso fue culpa mía, yo ya no quería seguir adelante con nada, porque la mejor oportunidad la había dejado pasar, y en el fondo pensaba que no me merecía otra.

Y lo demás fue rodado. El encierro fue progresivo, cada vez más radical. Los años pasaban entre las paredes de mi cuarto, las canas empezaban a aparecer, y las arrugas alrededor de mis ojos delataban el paso de un tiempo no vivido. Estaba ya en la treintena, sin apenas saber nada del exterior. Aislado del mundo, viviendo en el mío, y sin que nadie pudiese hacer nada para convencerme de que ésto no era una vida, sino una muerte… Sin que ni siquiera tú, mamá, pudieras sacarme de aquí, aunque lo intentaras…
Llegué a extremos insospechados incluso para mí. Jamás pensé que un simple despertador, me llevara a aquella situación. Dejé de lado a la gente que me quería. Olvidé a mi familia, en una época en la que sólo el tabaco y las pastillas me hacían perder la conciencia de todo, y me ayudaban a soportar mi miserable vida.
Y lo siento, siento todo lo que os he hecho sufrir. Siento no haber sido el buen hijo que todo el mundo decía que sería, siento no haber sido un buen hermano. Mis hermanas se casaron y yo no asistí. Mis hermanas me hablaron, y yo no respondí. Todos intentasteis ayudarme y yo no me dejé. Lo siento.
Pude hacerlo de otra manera, pero no quise. Pudo no afectarme tanto la caída, pude levantarme y seguir, pero yo no lo hice. Tuve miedo de la gente y no lo afronté. Fue más cómodo quedarme en la penumbra y ocultarme como una rata en la alcantarilla. Lo siento, nunca he merecido vuestro cariño, vuestro amor.

Y después de todo ésto llegamos al día de hoy, 23 de noviembre, día en el que estoy aquí escribiéndote mi historia. Y hoy decidí hacer algo por mi vida, decidí dar el primer paso para cambiarlo todo, y es contarte lo que sufrí, mostrarte lo que sentí. Perdóname, mamá.
Esta carta es para ti. Para quien me dio la vida, para quien vio como yo mismo la desperdiciaba, para quien intentó hacerlo todo y no consiguió nada. Para ti mamá, porque aunque ese día no me despertaras, he sido yo el que se ha dormido en la nada, el que no ha querido salir de este pozo que le ahogaba. Tan sólo yo mamá.
Aquí te dejo mi carta, mi historia, mi vida, tal y como no la quise vivir, desde el punto de vista de este hombre perdido, desde la mirada de este ángel caído.
Me voy, pero antes quería pedirte perdón y explicarte porque hice lo que hice. Es hora de hacer algo por mi vida, y cambiar la tuya, apartándote de este sufrimiento que comenzó aquel día.
Hasta siempre mamá. Te quiero.


Ángel metió la carta en un sobre. La dejó sobre la cama, al lado de una foto de la que siempre ha sido su familia. Abrió la ventana, y Ángel se lanzó al vacío. Intentó desplegar sus alas, pero en el fondo él sabía que no era un ángel, aunque siempre le hubieran llamado así.

Esta historia está inspirada en hechos reales.
Espero que el verdadero Ángel nunca acabe así.

20 de noviembre de 2008

Una foto especial...

Esta vez por partida doble, desde los blogs de X y Sandra, me llega la oportunidad de hacer ésto (es que no me ha quedado claro si es un meme, un premio, o qué narices…) que consiste en postear una imagen especial para ti. Y he aquí mi foto especial. Por lo que es, y por lo que significa.


Esta foto es de mi difunto perro Marcos; sí, tenía nombre de persona, ¿Qué pasa? Era un amor de animal. Creo que aún no había hablado de él, o al menos no le había dedicado un post como se merece. Así que, esta entrada sirve de homenaje, al perro más cariñoso, obediente y educado, que he conocido en toda mi vida. Era un perro mestizo, sin raza, como prefiráis llamarlo… Era un cruce entre otros cruces, pero tenía un algo especial que lo hacía diferente a todos los demás perros. Cuando todos ladraban por ladrar, él sólo lo hacía con motivo. Cuando todos se comportaban instintivamente, él se comportaba de un modo racional, muchas veces parecía una persona…

Marcos ya nos dejó el año pasado, pero todavía lo recuerdo cada vez que miro sus fotos jugando, corriendo, moviendo su cola… y sonriendo. Porque lo de este perro era algo extraño… siempre tenía un semblante agradable, como esbozando una sonrisa, o al menos, esa era mi teoría.

Pues nada más por el momento, ésta era mi foto especial… Podía haber puesto muchas, de muchos momentos con mi familia, con mis amigos, fotos chorra de cosas inverosímiles, que tienen gran valor para mí, no por la foto en sí, si no por todo lo que significan. Pero me he decidido por ésta, porque del mismo modo, no sólo es lo que es: un precioso perrito encandilado por el objetivo de una cámara; si no todo lo que simboliza: el recuerdo de la única mascota que he tenido en mi vida, la añoranza de sus lametones y sus cariños, de su pelo suave entre los dedos… La nostalgia de saber, que nunca lo volverás a ver…

Y al igual que los que me preceden, esta vez voy a nominar a quienes quiero que lo hagan: La pequeña Candi, Ayla, Nebulina, Centollo mecánico y Latita de almendras. Me gustaría que mostrarais vuestra imagen especial…

18 de noviembre de 2008

Contigo no... bicho!

La verdad es que yo lo descubrí hace sólo un par de días, gracias a un amigo, si no, yo no hubiera dado con este tremendo video. Igual algunos ya lo conoceis, pero a otros despistados como yo, que aún vivís en el desconocimiento, yo os abriré los ojos.

"Contigo no, bicho", es ya un clásico de Youtube. Os pongo en antecedentes: Tras una noche de juerga de un grupo de estudiantes, y en plena resaca, a uno de ellos se le ocurre grabar a su compañero, que tuvo una experiencia traumática la noche anterior. Lo que ocurrió es que una chica (Chewaka) le rechazó, le dijo que no quería nada con él... pero lo peor fue cómo se lo dijo: Le llamo bicho!! Tremenda hija de una hiena!! ¿Como le pudo llamar bicho? ¿Que necesidad había? Lo mejor es la manera de contarlo del muchacho en cuestión. Juzgad por vosotros mismos.


16 de noviembre de 2008

Un aleph en un rincón...

Alguien me puede decir con conocimiento de causa… ¿Qué es un aleph? Llevo un rato dando vueltas por la red intentando dilucidar que es un aleph, y me he enterado de más bien poco. Parece ser que es un personaje de un cuento de Jorge Luis Borges, y poco mas sé…

Esto viene a colación de las miles de escuchas que llevo de una canción que lleva este nombre (X sabrá de lo que hablo antes de seguir leyendo…) Pues sí, se trata de “El aleph”, la canción número 7 del disco Retales de carnaval, de Nena Daconte, que ya había alabado anteriormente aquí en mi blog. Ahora no puedo deshacerme de esta canción, me acompaña a todas horas: la canto en la ducha, la tarareo entre clase y clase, la silbo mientras camino, la escucho en el bus, en el coche, e incluso en este mismo instante… y es que es, sin duda, una de las mejores canciones de cuantas ha escrito esta chichilla llamada Mai… apuesto a que será el próximo single. Además, ella misma ha dicho que si tuviera que escoger una de todas las que ha compuesto, se quedaría con ésta. Así que por algo será…

A parte de ésto, he tenido que lidiar con la curiosidad de que era un aleph, que por unas o por otras nunca me había acordado de buscarlo, y hoy que lo hago no encuentro nada concreto… Vale, que es un personaje de un cuento, pero ¿qué es? Por lo que tengo entendido, el aleph es un personaje que cuando aparece, ayuda a ver con más claridad el mundo a tu alrededor, otros puntos de vista... o te da una visión objetiva acerca de ellos. Además, el aleph parece estar relacionado con la eternidad y el infinito. Vaya usted a saber…

Pues esto es lo único que he podido encontrar de este ser o lo que quiera que sea, que salió en un rincón un buen día, y desde entonces Mai perdió su corazón, no sabe dónde está, dónde se ha ido a derrumbar… Si alguien sabe de él, o del aleph, que me lo diga, y me saque de estas dudas que me acechan. Ahí os dejo la canción, por si ayuda en algo… Eso no sé, pero bonita, un rato…

13 de noviembre de 2008

¿Soy yo?

Es una pregunta retórica, aún no me he atrevido a contestarla… Pero lo voy a intentar con un nuevo test, y no sé cuantos van ya… la verdad es que no llevo la cuenta… Se trata de decir como soy YO, completando el predicado de cada oración de la lista, que ya cuenta con un sujeto invariable, y su verbo correspondiente. Me gustaría que lo hicierais algunos de vosotros, a ver que os parece… Yo me dispongo a ello:

- Yo tengo… un blog que no me merezco!
- Yo digo… o suelo decir, lo que pienso en cada momento.
- Yo pierdo… o estoy perdiendo la cabeza… (o ya la he perdido…)
- Yo necesito… a mi gente. No soy nadie sin ellos.
- Yo debo… estudiar para los parciales!! Pero no lo estoy haciendo…
- Yo temo… a pocas cosas en esta vida… Vamos, que soy un valiente! No, en serio, le temo a la muerte.
- Yo creo… que el futuro no está grabado a fuego…
- Yo … que hay gente con la que siempre podré contar en mi vida, que nunca me fallarán.
- Yo lloro… más bien poco… y debería hacerlo más para liberar toxinas…
- Yo canto… en la ducha muy a menudo.
- Yo río… todo lo que puedo! Si me ves y no tengo una sonrisa en la boca, algo me pasa…
- Yo miento… sólo a veces… xD
- Yo vivo… de las pequeñas cosas, de cada pequeño momento…
- Yo bebo… sólo en ocasiones especiales…
- Yo pienso… luego existo… o ¿existo porque pienso?
- Yo escucho… a todo el mundo. Una de mis cualidades, y no porque yo lo diga, es que sé escuchar…
- Yo como… cuatro o cinco veces al día… siempre que puedo no me salto el aperitivo de media mañana, o una buena merienda.
- Yo disfruto… con mi familia y amigos.
- Yo aprendo… en cada esquina. El destino te sorprende dejándote una válida enseñanza, cuando menos te lo esperas.
- Yo olvido… o intento olvidar las cosas malas, para quedarme con las buenas.
- Yo hablo… por los codos! Pero lo dicho, también sé escuchar.
- Yo compro… más de lo que debería, pero sin llegar a caer en el consumismo barato… (o caro)
- Yo veo… que voy a llegar al final de este test agotado! ¿No se acaba ya?
- Yo quiero… estar bien, ser feliz, y tener una vida normal, en la que si fuera posible, todos cumplamos nuestros sueños.
- Yo siento… que la vida me debe muchas cosas…
- Yo soy… yo. El que habla y escribe. YO…popolin.

10 de noviembre de 2008

Retales de amor...

Este fin de semana me dió por ver una película que tenía desde hace tiempo en pendientes, y me sorprendió gratamente. Se trata de París Je t´aime, un film compuesto de unas cuantas historias, cortos de unos cinco minutos, acerca del amor, que suceden en distintos rincones de París. Como podréis imaginar, ya sólo por el marco en que se desarrolla merece la pena ser vista.

Este film tiene la ventaja de que son porciones de vida, son relatos cortos, que se ven con facilidad. Por contra, tiene el inconveniente de que algunos cortos son muy buenos, y otros verdaderos fiascos, y por ello desluce sobremanera la obra al completo. Cada historia tiene diferentes personajes, y esta rodada por distintos directores, con la participación de estrellas de todo el mundo... y entre ellos, hay españoles: Leonor Watling y Javier Cámara, que participan en el corto de Isabel Coixet (Uno de los mejores, por cierto). Pero yo me voy a quedar con dos historias, las dos que más me han gustado a mí, y que las voy a compartir con vosotros.

La primera, es la historia escrita y dirigida por los hermanos Coen, que me encantó por lo fresca y divertida que es, y por un genial Steve Buscemi, que soporta todo el peso de la trama. Muy graciosa.
Y la segunda, que es la que dirige Tom Tykwer (conocido por El perfume), y para mí la mejor de todas, por el ritmo trepidante del relato, por lo original, por su belleza artística, y por el desenlace inesperado.
Espero que disfruteis, en pocos minutos, de estos retales de amor...

‘Tuileries’, escrito y dirigido Joel y Ethan Coen.

‘Faubourg Saint-Denis’, escrito y dirigido por Tom Tykwer

7 de noviembre de 2008

Discriminación positiva

Lo primero que quiero dejar claro, es que yo estoy en contra de cualquier tipo de discriminación, ya sea racial, por cuestión de género, o por tendencias sexuales, y también por supuesto estoy en contra de la discriminación positiva, que es lo que me toca de cerca en estos momentos…
A mí no me parece bien que las mujeres ganen menos por desempeñar el mismo trabajo que un hombre, como así ocurre muchas veces. Tampoco querría ver como muchos inmigrantes se sienten desplazados, e incluso insultados en ocasiones, solamente por ser de otro país o raza. Lo mismo ocurre con las personas homosexuales, que aún tienen que aguantar miradas maliciosas, o murmullos que no dicen otra cosa que no sea maricón. Por todo ello, tampoco me gusta ver, como le dan un puesto de trabajo a un sordo, por el mero hecho de serlo. Y eso es lo que ha ocurrido en mi clase, o al menos, es lo que nos parece a nosotros…

Resulta que esta semana nos han presentado al nuevo profesor que han contratado para una asignatura troncal, (Ordenación el territorio, para más señas). Y cuando llegó y empezó a hablar, parecía que se trataba de una cámara oculta, broma de mal gusto, o similar. Yo no dudo de las capacidades de este jovenzuelo, que las tendrá, muy escondidas, pero seguro que las tiene. Seguro que domina muy bien el tema en que desarrolla su profesión, y está harto de gestionar proyectos de ordenación territorial, tampoco lo pongo en duda. Pero si no vales para estar en la palestra dando clase, lo siento mucho, amigo, pero no vales…
Aún me sigo preguntando por qué le contrataron… ¿Se supone que él era la mejor opción? Permitidme que lo dude…

Bueno, después de todo ésto, aún seguís sin saber que ha hecho este chico para que yo hable así de él, y la verdad es que hacer hacer, no ha hecho nada, culpa suya no es. Lo que me revienta, es que estamos casi convencidos en clase, que lo han contratado porque está sordo. Bueno, mejor dicho, por considerar su falta auditiva como una cualidad más del muchacho, en este mundo de denuncias continuas, por racismo, homofobia y discriminación varia, la mayoría con toda la razón, por supuesto.
El caso es que lleva un Whisper XL (los de mi quinta os acordareis de él) en cada oreja, y con ellos escucha más o menos bien lo que le dices, aunque no siempre. Pero ésto es lo de menos, lo más grave, es que él no se debe oír muy bien su propia voz (esa es mi teoría) porque no vocaliza, no pronuncia, parece que le cuesta mover los labios o abrir la boca para emitir sonidos, y todo ello acompañado de un tono de voz muy bajo, os podéis imaginar. Igual él piensa que habla alto, pero creedme ¡¡no lo hace!! Por ejemplo, ayer llegó a clase y debió hacer una broma, porque él se reía… pero los demás no nos enteramos de nada. Yo le entendí: “·@#¬€¬&l?’¡ioe*+jkfd<##j¡¿? barriga” ¿os podéis creer que sólo logre percatarme de “barriga”? Pues nada, nos quedamos sin saber qué quiso decir.

Y al final ¿qué es lo que ocurre? Pues que tomar apuntes en esa clase es una tortura, siempre te estas preguntando si le habrás entendido bien o no… Además, ha venido el tío exigiendo y dando caña. Las presentaciones de Power point que usan todos los profesores para dar la materia, te las dejan siempre colgadas en la red o las puedes conseguir en fotocopiadora. Pues bien, éste se permite el lujo de no dejarnos las diapositivas, porque no le sale de las narices. Además el primer día dijo que él preguntaba mucho, porque prefería no hablar demasiado… pues nada hijo mío, ser profesor es la profesión idónea para no hablar en público…
En fin, que me hierve la sangre con este tema. Para mí un claro ejemplo de discriminación positiva… tan reprochable y lamentable como las otras. Pero éste es un tema muy polémico, en agrio debate... ¿Vosotros qué opinais?

4 de noviembre de 2008

Cosas del karma...

Después de mi relato del constipado, del que ya estoy casi recuperado, hoy voy a cambiar de aires con una entrada repleta de humor. Humor gamberro y surrealista de una serie, que empecé a ver hace un par de semanas, por las muchas recomendaciones que le precedían… y la verdad, es que no me ha defraudado. Os hablo de Me llamo Earl, una grata sorpresa, una serie fresca y divertidísima!

Estoy en el ecuador de la segunda temporada de la serie, y es que no paro de reírme. Como ya sabréis, o sino os lo cuento yo, la serie tiene como punto de partida a un chico malo, en este caso Earl, que un buen día descubre accidentalmente el karma, ese misterioso ente efímero que lo impregna todo, procurando justicia divina al mundo entero. Resulta que Earl se da cuenta de que durante toda su vida se ha portado mal, y decide hacer una lista con sus malas acciones, para intentar enmendarlas. Ya os podéis imaginar, a cada cual más disparatada. Y de ahí surgen un montón de aventuras que rodean a unos personajes llevados al extremo, pero con un carisma indescriptible. Desde el mismo Earl, pasando por su hermano medio lelo, pero de buen corazón, Randy; la asistenta latina Catalina, o la ex-mujer de Earl, Joy, que para mí es el personaje más logrado de la serie. Es brutal lo que puede llegar a decir esta mujer, con su aire de violencia incontrolable y su verborrea arrabalera; todo ello mascando chicle con la boca abierta como nadie. Como os digo, mi personaje favorito…

Por todo ello, he decidido recopilar algunos fragmentos y frases de esta ya mítica serie, para que os animéis a verla los que no lo hayáis hecho, y para que recordéis los momentazos que hemos vivido, los que ya la estéis disfrutando. He aquí otra obra maestra de la televisión actual.

Tened en cuenta que leído pierde, pero si os lo imagináis en imágenes en movimiento, gana muchísimo! Lástima que no pudiera encontrar los videos para plasmarlos aquí. Sin más dilación, os dejo con esta hilarante recopilación. Seguro que el karma me lo agradecerá.

A Earl se le aparece en sueños un muerto y le dice a su ex-mujer: “Joder Joy, es que se me aparece en sueños”. A lo que su ex responde: “Es tu conciencia, idiota! Ignórala! Es lo que hacía yo cuando te ponía los cuernos”
Catalina, la criada latina, con antecedentes familiares más que dudosos sentenció, a cuento de que Earl se había acostado con la madre de su amigo: “A los hombres no les gusta cuando otro hombre duerme con sus madres. Por eso es que mi hermano mató a mi padre.”
Acerca de este mismo tema, Earl dijo: Si hay una lista de las 10 cosas que un hombre nunca quiere discutir con otro hombre, apuesto a que “Lo siento, me acosté con tu madre” está en el número dos; justo después de “Lo siento, me acosté con tu padre”.
Randy, en una de sus deducciones mentales (hay que tener en cuenta que es especialito) dijo: “No es divertido ser ciego. ¿Por qué Stevie Wonder siempre está sonriendo? Tal vez él no vea que está sonriendo…”
Earl encuentra a su mujer con la nevera abierta intentando refrescarse en un día de calor, y dice: “¿Qué haces? ¿No sabes que hay una cosa llamada calentamiento global, que hay que frenar?” A lo que su ex mujer responde: “Y qué crees que estoy haciendo, idiota!”
Joy lleva a su gato a una feria de mascotas, y lo examinan. Cuando ve que están mirando el culo de su gato, Joy pregunta: "¿Qué coño mira en el culo de mi gato? ¿Quiere saber si caga? ¿Le traigo un zurullo?"
Earl, a su amigo gay, cuando intenta darle clases para comportarse como un machito, le brinda una lección insuperable: “Nunca digas mega, sino va seguido de watio.”
Joy, al conocer que su abogada es sorda, soltó: “Discúlpeme, pero no quisiera una abogada cuyas orejas sólo sirven para llevar las gafas… no es nada personal…” todo ésto, con una sonrisa. Que mujer!
Randy, se adentra en el mundo de la zoología con esta pregunta acerca de las lombrices: “¿Las lombrices tienen culo? Porque si lo tienen es igualito que la cara…”
Randy, al ver que su hermano tenía un ordenador portátil robado, se sorprendió, y dijo: “Ala! una máquina de porno!!”
Joy, después de fumarse unos cuantos cigarrillos, para coger las cenizas, y hacerlas pasar por las de una muerta, casi la descubren cuando encontraron una colilla en la urna… pero ella salió airosa diciendo: “Es lógico que ahí haya una colilla, eso fue lo que la mató…”
Joy les trae a Earl y a Randy, unas pastas envenenadas para deshacerse de su ex. Randy va directo a por las pastas, y Earl le avisa: “No te comas las pastas, que están envenenadas.” Y Randy, dudoso, pregunta: “Pero… ¿mucho?”

2 de noviembre de 2008

Ahh-chooo!

Os escribo envuelto en una manta, teniendo frío y calor a la vez, con dolor de garganta, rodeado de pañuelos de papel y respirando por la boca, pues mis narices no dan más de sí, debido al taponamiento que manejo… Y es que, siempre me he preguntado: ¿De dónde salen tantos mocos? Parece ser que las inmunoglobulinas tienen mucho que ver en ésto, pero sigo sin enterarme al cien por cien. El caso es que con estos síntomas, ya sabéis lo que me ocurre… ¡que tengo un trancazo del tres! El primero de la temporada…

Siempre me ha gustado esa expresión “del tres”, no sé si es un término local o se dice por toda España…
Bueno, que me desvío del tema. El cambio de temperaturas parece haberme sorprendido de lleno: el viernes comencé a tener los primeros síntomas, y ayer por la noche ya no podía hacer ninguna inspiración…
Yo siempre he sido más de catarros de nariz, que de garganta, anginas o pecho, ¿Vosotros de cuál sois? Es como lo del Kas naranja o limón… En fin, que debo tener también fiebre y estoy delirando… Cuando lea la entrada al completo, seguramente no tenga mucha coherencia, pero hoy es lo que hay…
Pues eso, que a mí los resfriados me afectan más a las narices, con mocos que no paran de salir… aunque casi lo prefiero, porque tener mucha tos y dolor de pecho, me ha ocurrido alguna vez y se pasa francamente mal. Mi garganta también se ha visto afectada en esta ocasión, pero de momento sobrellevo el dolor.

Lo que más me fastidia de estos procesos gripales, es eso de que no me sepa la comida a nada… bueno, ni la comida, ni distinguir los olores, ni nada que se deba hacer con mi inservible napia. Como por comer, pero todo me sabe a la nada más insípida que os podáis imaginar…
Otro de los problemas, son los estornudos… que cada poco te viene uno, con la consiguiente liberación de microbios, si no tienes un poco de cuidado. Además, yo no soy de esas personas que pueden controlarlo… Hay gente que es capaz de “tragárselo” digamos… ya sabéis, esas personas, que estornudan con la boca sellada, y que no hacen ruido. Yo eso soy incapaz, me gustaría saber hacerlo, porque queda muy fino, pero yo no, yo a lo burro, cuando me viene un estornudo para mí es incontrolable, y... ahh-chooo!
Qué le vamos a hacer, no soy perfecto, y mis estornudos sonoros quizás me hagan más humano… (La bobada de las 13:15)

Pues os voy a ir dejando después de esta reflexión sobre los resfriados. Me voy a ir a por mi dosis de paracetamol en vena, y un poco de acetilcisteína, que nunca viene mal. Ya sabéis, la automedicación, es la base de nuestro sistema sanitario.

31 de octubre de 2008

This is Halloween!

Qué grande la técnica del stop-motion! Qué grande Tim Burton, y qué grande esta película!
Pues eso, que esto es Halloween!! Una fiesta que la verdad, no va conmigo, pero que cada vez se está arraigando más en nuestra sociedad, por esa manía de importar todo lo yankee…

Con este pequeño fragmento de este gran film, os deseo a todos...

¡¡Feliz Halloween!!

26 de octubre de 2008

No son sólo palabras...

A veces no le damos a las palabras la importancia que tienen, esas grandes desconocidas y menospreciadas, que muchas veces se utilizan sin pensar, tan sólo por hablar. Y es ahí cuando pueden surgir problemas y malentendidos, porque decimos las cosas por decir, y no pensamos verdaderamente en lo que pueden llegar a significar.
Estas líneas van dirigidas a ti, y sólo tú las vas a entender por completo. Porque creo que muchas veces has utilizado las palabras, sin pensar en que no siempre se las lleva el viento; sin pensar en que no son sólo letras ensambladas, sin darte cuenta de lo que podían significar para mí: porque las palabras, no son sólo palabras.

Quiero empezar diciéndote que tengo la certeza de que siempre seremos amigos, sin embargo, cada vez veo más claro que la distancia que nos separa siempre estará ahí. Con esta carta, llamémosla así, no pretendo nada… sólo decirte lo que no te dije, sólo responder a tus peticiones de aclararlo todo.

Comienzo por el verano. Un verano que ha sido muy divertido, pero a la vez extraño. Nos encontramos en nuestro lugar preferido dispuestos a dar todo de nosotros, a compartirlo todo, y a pasarlo bien; y así fue en muchos momentos. Otros, como sabrás, no fueron plato de buen gusto para mí…
No me preguntes por qué, ni por qué no… pero me afecta todo lo que haces o te ocurre cuando te tengo cerca, es como una extraña maldición… Ahora sé que ya no te quiero, pero siempre estás ahí… y cuando te vuelvo a ver, cuando vuelvo a estar cada día contigo, me siento con el absurdo derecho de pensar que sigues siendo más que una amiga, y ya no es así. Sé que lo que digo puede sonar raro… pero en ese período que compartimos, es como si me dieras el ilógico permiso de tenerte, de acariciarte o incluso de tocarte el culo. Sí, disparatado pero cierto, me siento con el derecho de poder tocarte el culo, o besarte, en cualquier momento; otra cosa es que no lo haga porque soy una persona sensata y racional.

Quizás ésto esté motivado porque hace unos meses me volviste a decir que sentías algo especial por mí. Momentos en los que estabas conmigo, momentos en los que no ocurría nada especial, pero para ti sí que lo eran, o al menos, eso me llegaste a decir… Y sé que fui yo quien te lo sonsacó, pero recuerda que me lo dijiste… lo volviste a hacer; de nuevo sin pensar, que no son sólo palabras…

Volviendo al mes de agosto que dio para mucho, me acuerdo de una conversación, un tanto surrealista, entre sangría y ron, en la que te llegué a decir que yo sólo besaba a quien yo quería besar. ¿Recuerdas que respondiste? Me dijiste que lo hiciera, que besara a quien quisiera, y no me digas que no sabías perfectamente quién era… ¿Por qué lo hiciste? Hasta los que nos rodeaban nos dejaron solos al ver el cariz que estaba tomando la escena… Evidentemente yo te dije que no era el momento, y de nuevo tu me incitaste, diciendo: ¿Y cuándo va a ser el momento?
¿Por qué seguiste haciéndolo? ¿Te gustaba jugar a sentirte querida?

Espero no estar siendo demasiado duro en esta carta que tanto me está costando escribirte. Era lo que querías y yo lo estoy plasmando en estas líneas, porque fue mucho lo que quedó en el tintero, y quiero esculpirlo en letras, en palabras, que son algo más que eso.

Poco después pude comprobar que lo que me habías dicho meses atrás se volvía a olvidar. Comencé a ver que te importaba demasiado quien tú ya sabes: tu amigo, nuestro amigo… y empecé a temerme lo que ocurrió al final. Y aunque yo intentaba convencerme de que no volvería a pasar, a la vez me estaba preparando a mí mismo, para afrontar que así sucedería tarde o temprano, y yo tendría que estar ahí para poner buena cara, decir que no pasaba nada, escucharte, alabar tu sinceridad (como así hice) e intentar reaccionar como lo haría tu mejor amigo. Y así fue. Yo estuve ahí, con la mirada rota y el corazón en la mano, para intentar protegerlo de lo que le quedaba por latir. Hice todo lo que pude para que no me doliera… y aunque me afectó, al final no fue para tanto.
Otro cantar fue verte con otro, con mis propios ojos. Esta vez un desconocido, y como podrás comprender no me apetecía acompañarte, no tenía ganas de estar allí, aunque según tú, me necesitaras. Ojos que no ven corazón que no siente, o al menos, siente menos. Eso fue lo que intenté.

Pero al mismo tiempo, tu seguías haciéndome dudar. Una de cal y otra de arena. Intentaste dar cariño a todos, cosa que no me parecería mal, si uno de esos “todos” no fuera yo. Ahora es cuándo me dirás que darse mimos en plan amigos está bien, y yo no lo dudo… pero lo que no me puedes negar es que los tipos de cariño eran bien distintos. Estaba muy desorientado…
Yo ya sabía a estas alturas, que lo supuestamente especial que era para ti, se había esfumado; pero al mismo tiempo, no me tratabas como a los demás… Porque a los demás no les tomas de la mano; a los demás, no les permites que acaricien tu ombligo, que recorran tu espalda… ¿Por qué a mi sí, sino tenemos nada? ¿Por qué también me confundes sin palabras?

Y ya voy a ir terminando esta carta, una de las que más me ha costado escribir en toda mi vida, por la única razón de que es para ti. Para mi compañera de andén, aunque nunca podamos subirnos los dos al tren; nunca, tú y yo. Porque no vamos a ningún lado. Porque sabes que viajar juntos no tiene sentido, porque vamos por distintos caminos, porque no tenemos un mismo destino. Pero cuando coincidimos en la estación, me encanta estar contigo. Tan sólo ese lapso de tiempo mientras esperamos nuestros respectivos trenes… porque para mí, en esos momentos, sí eres especial…
Y como yo no lo soy para ti, o sólo lo soy a veces, te pido que me hagas un favor. Te ruego que dejes de despistarme, que dejes de comportarte como un jeroglífico o que te traduzcas para mí. Te lo suplico, no sigas cogiéndome de la mano en la penumbra, no dejes que recorra tu piel, no permitas que mis manos dibujen tu ombligo, no hagas que se entrelacen nuestros dedos, no me vuelvas a decir que te bese, porque te besaré.
Y por último, te pido que nunca, jamás, vuelvas a sugerir que sientes de nuevo algo especial por mí. Aunque sea cierto, aunque te vaya la vida en ello, aunque creas que las palabras se las lleva el viento… Porque ahora sabes que no, que son algo más que eso; ahora sabes que las palabras, no son sólo palabras.


P.D.: Te encontraré, eternamente en el andén…

23 de octubre de 2008

50 about me...

Pues aquí tenéis otra oportunidad para conocerme mejor… Otra de tantas, gracias a la invitación que me llega de X. Sin más demora, comenzamos con otras 50 sobre mí:

01. Nombre completo: Yopo Polín, con tilde en la i.
02. ¿Por qué te pusieron ese nombre? Es una larga historia. Respecto a mi verdadero nombre, sólo decir que en mi familia no son muy originales que digamos.
03. ¿Le pides deseos a las estrellas? Alguna vez en plan de coña, si que lo he hecho, pero sin esperar que me los concedieran…
04. ¿La última vez que lloraste? Pues no recuerdo… hace mucho tiempo.
05. ¿Pan con qué? Con Nocilla, mmmm!
06. ¿Te gustan los animales? Sí, bastante, sobre todo los perros.
07. ¿Cuántos hijos tienes? Espera que cuente… ninguno, y sin perspectivas de tenerlos…
08. ¿Colaboras con alguna ONG? No, aunque me gustaría…
09. ¿Si fueras otra persona serías tu amigo? No sé, supongo que alguno podría ser…
10. ¿Tienes un diario de vida? Se podría decir que sí… ¿te parece poco tener un blog?
11. ¿Eres sarcástico? Pues no lo sé… supongo que a veces sí, como todo el mundo…
12. ¿Harías puenting? Sí, no lo descarto…
13. ¿Cuál es tu cereal preferido? Los cornflakes con virutas de chocolate.
14. ¿Te desabrochas los zapatos antes de sacarlos? La mayoría no… por pereza más que nada…
15. ¿Crees que eres fuerte? Depende de para qué, depende del momento… pero pienso que sí.
16. ¿Tu helado preferido? El de nata, de limón, de stracciatella… difícil elegir.
17. ¿Qué número calzas? Un 43.
18. ¿Grupo de música preferido? Amaral.
19. ¿Qué es lo que menos te gusta de ti? Que soy muy perfeccionista, demasiado! Podría parecer una virtud, pero no lo es…
20. ¿A quién extrañas mucho? A nadie, o a mucha gente… según se mire!
21. ¿Cuál ha sido la última película que has visto? El sábado pasado, El niño con el pijama de rayas.
22. ¿Qué color de pantalones y zapatos tienes puesto? Pantalones azules, y zapatos ninguno… estoy descalzo, algo habitual en mi persona…
23. ¿Cuándo fue la última vez que hiciste el amor? De mi vida privada no hablo... (No, que va!)
24. ¿Qué estás escuchando en este momento? Ahora hay un silencio absoluto en mi habitación…
25. ¿La última persona con quien hablaste por teléfono? Con una amiga.
26. ¿Tu bebida favorita? El Nestea. Yéndonos al alcohol, la cerveza.
27. ¿Deporte favorito para ver por TV? El tenis y la Fórmula 1.
28. ¿Comida favorita? La tortilla de patatas.
29. ¿Final triste o final feliz? Sé que va a sonar extraño, pero los finales felices me parecen poco originales en la ficción… prefiero un final dramático. En la vida real, mejor que sean felices, donde va a parar!
30. ¿Tienes mascotas? Actualmente no.
31. ¿Día favorito del año? El 24 de diciembre. La Navidad es la mejor época del año!
32. ¿Besos o abrazos? Ambos dos.
33. ¿Eres una persona alegre? Si me considero… La mayor parte del tiempo, sí!
34. ¿Has viajado mucho? Menos de lo que me gustaría. Me encanta viajar.
35. Una fantasía sexual: Pues ninguna en especial… o muchas…
36. ¿Cual es la última comida que preparaste? La comida del pasado domingo.
37. ¿Color favorito? Azul.
38. ¿Qué viste anoche en la tele? Pues nada, llegué muy tarde a casa, y pronto a la cama…
39. Algo que te haga perder los papeles: La mentira, que me quieran hacer creer algo que sé fielmente que no es verdad. Me hierve la sangre!
40. ¿Dónde es lo más lejos que has estado de tu casa? Roma.
41. Algo que te daría morbo hacer: Volvamos a lo del probador… de Zara o cualquier tienda del grupo Inditex me vale! xD.
42. ¿Eres abiert@ a opciones sexuales como el sexo oral o el sexo anal? Sí.
43. Postre favorito: La pannacotta, buenísimo!!
44. Un sitio para desaparecer: Mi pequeña parte del mundo que pocos conocemos…
45. ¿A qué animal le tienes más miedo? Desde que me picaron dos el mismo día (en momentos distintos), a las avispas.
46. No te gustaría morir sin probar: Ay, no sé, tantas cosas…
47. ¿Alguna vez te pillaron haciendo el amor? No.
48. Tu nivel de paciencia de 0 a 10 es: Mucha! 9 ó 10!
49. ¿Qué libro estas leyendo? Tombuctú, de Paul Auster.
50. ¿Alguna vez tomaste drogas? No.

21 de octubre de 2008

Are we human?

Hace unos días vivía aún en el pleno desconocimiento de que estaban de vuelta, y cuando me dijeron que sí, que eran ellos, y que volvían con “Human”, no pude hacer otra cosa que alegrarme, correr a Internet y escuchar lo nuevo de The killers.

La verdad es que “Human” es un poco distinto a todo lo anterior, más pop, más influencia de la electrónica, y un lugar más pequeño para el rock… pero aún así me gusta. Yo los descubrí relativamente tarde, debido entre otras cosas, a las tardes de Singstar, cantando el aclamado Somebody told me, que tanto me gusta…

Sin enrollarme más os dejo la canción adelanto de su nuevo disco, que saldrá a finales de noviembre… El video es simplemente impresionante! Por fin vuelven los asesinos más célebres de todos los tiempos, preguntándose si son humanos: y yo creo que no, pertenecen a otra raza…


17 de octubre de 2008

Muestreando, muestreando...

Así, por duplicado. Porque tal y como dice el título de esta entrada, me he pasado la mañana muestreando en el río. Yuhu!!
La verdad es que tardamos más tiempo del deseado, dada nuestra inexperiencia, pero al final, la mañana ha dado sus frutos… Empiezo la historia por el principio…

Érase que se era, un grupo de alumnos de Indicadores biológicos (así es como se llama la asignatura…) que una mañana de otoño, cogieron el coche, y se encaminaron a un pueblecito en la ribera del río Bernesga (sí, es el río que pasa por León capital, pero en la ciudad no valía…) llamado La Seca (a secas…) y no es porque no tenga agua dicho lugar, sino por otro m
otivo que aún desconozco… El caso es que allí llegamos, cargados de bártulos como botas y vadeadores, necesarios para nuestra inmersión en el río, así como la red de mano para el muestreo, botes y alcohol, para las muestras, pinzas… dispuestos a comenzar con nuestra labor en cuanto fuera posible… Y os preguntaréis: ¿Qué coño muestreabais? Igual os lo preguntáis sin el “coño”… pues bien, yo os respondo: Macroinvertebrados. Y os volveréis a preguntar de nuevo ¿y qué coño son los macroinvertebrados? Si no sois malhablados os lo habréis preguntado otra vez sin el “coño”… pues resumiendo, los macroinvertebrados son los bichitos más abundantes en las aguas de los ríos, que nos pueden dar información sobre el estado de calidad de ese río, en cuanto a contaminación se
refiere. Lo que vienen siendo indicadores biológicos de la calidad del agua (anda! Pero si éste era el nombre de la asignatura…) Tras recogerlos con la red, se vierten en bandejas para limpiar un poco la muestra, y ver los bichos. Os he dejado unas fotos para acompañar la historia, pero los macroinvertebrados no se llegan a ver entre tanta… no sé como llamarlo… mierda.

Enseguida tuvimos compañía en la faena. Llegaron a los 10 minutos unos obreros que estuvieron pintando la valla de un puente cercano… Y ¡cómo no! surgieron las típicas preguntitas de: ¿Qué venís a pescar? Oye, pues si venís a por cangrejos, hay un montón! Y era cierto, pues en nuestro muestreo pescamos un cangrejito de río… pero no era nuestro objetivo…
También tuvimos alrededor, los inconfundibles corrillos de ancianos jubilados que hoy observaban por partida doble: a los obreros que pintaban de un azul eléctrico la barandilla del puente, y a unos estudiantes, que desde su perspectiva estaban haciendo
cosas extrañas… Llegué a oír lo que comentaban, y uno decía: ¿éstos que hacen? A lo que otro respondía: Andarán buscando fósiles… Yo no hice otra cosa que reírme; no me apetecía dar explicaciones a todo el mundo.

Tras recoger cuatro muestras, y darnos cuenta de que los obreros habían acabado y se habían ido (a la una en punto, por supuesto…) sólo tuvimos que hacer una cosilla más: Evaluar el estado de la ribera. Ésto se hace mediante un índice llamado QBR, y preferibleme
nte desde un puente, dónde se observa mejor la vegetación de ribera, y el estado de la misma… Así que entramos en el puente saltando la verja de seguridad que habían dejado los obreros, pues no se podía pasar, no vaya a ser que nos manchemos de azul recién pintado… y desde lo alto del puente finiquitamos nuestra tarea.

Ésta ha sido mi aventura de hoy, bastante productiva, por cierto. Tras hacer todo el trabajo nos tomamos unos minutos para conocer el pueblo. Nada del otro mundo, para qué engañarnos… Así que carretera, y vuelta a León. Se acabo el día de muestreo.

13 de octubre de 2008

Noche en una cueva

Este fin de semana ha dado para mucho. Entre otras cosas, he pasado la noche en una cueva… Dicho así parece que he dormido en una caverna como en los tiempos del paleolítico, pero en realidad, lo que ocurrió fue que tuve una cena en una cueva. En la actualidad se llama cueva a lo que antiguamente eran bodegas, y hoy están remodeladas para dar cabida a unos restaurantes subterráneos con mucho encanto… juzgad vosotros mismos.


La cena estuvo francamente bien. El restaurante está especializado en comida de la tierra, pero nosotros tampoco elegimos los platos más típicos. Pedimos en plan de raciones, para intentar probar varios platos. Concretamente, el menú fue el siguiente:

Pastel de cabracho.
Pastel templado de queso azul con salsa de aceite de pistachos.
Templada de tomate y queso de cabra
Tortilla guisada
Picadillo de cerdo con patatas y huevo de corral

Lo más típico de todo es la tortilla guisada, que es una tortilla normal, pero que luego se hace a la cazuela con una salsa de tomate, pimiento y cebolla, y creo que al horno (aunque esto último no lo podría asegurar…) El caso es que está realmente buena. Los pasteles que pedimos de entrante, también estaban muy ricos, y se toman con pan de pueblo tostado, todo un acierto!

La compañía, pues también inmejorable: con unos amigos, y unos amigos de mis amigos (que redundante soy a veces…) que resultaron ser muy majos… y valencianos, por cierto, más concretamente de Villena (Alicante), que estaban de visita por León, durante este fin de semana.

Desde aquí os recomiendo a todos los que estéis de paso por León, o a los que estéis planeando una escapadita por estas tierras, que no dejéis de visitar estos restaurantes-cueva, a unos 20km de la capital leonesa, en un pueblo llamado Valdevimbre. Merecen mucho la pena, es un lugar distinto y acogedor, para disfrutar de una velada inolvidable.

10 de octubre de 2008

Entre el frío y el dolor

Fue el mismo día de invierno, entre blancas montañas y un frío intenso, cuando un rayo de luz que derretía el aliento, penetró por los cristales de la ventana del salón para recordarme cómo cambia la vida en poco tiempo.
Acababa de encender la chimenea, y la estancia aun tiritaba entre sombras de fuego. Yo seguía tumbado en el sofá, envuelto en dos mantas, que cubrían mi destemplado corazón, mientras la nieve seguía cayendo, y el viento helado soplaba en el exterior.

La llama comenzaba a caldear el ambiente, y mi pensamiento se esforzaba en revivir aquellos momentos de felicidad, un año atrás, en el que estábamos los dos juntos en aquel mismo lugar. Las cosas cambian, y la vida te pone en aprietos que hay que superar, cuando todo lo que te rodea, desaparece en un instante, para no volver jamás.
Todavía nos recuerdo cuando dormíamos los dos frente a esa chimenea, para no perder calor, envueltos en dos mantas, mientras nuestros cuerpos latían al unísono. Hace tan sólo un año, que estaba ella aquí, respirándome en la nuca, despertándome al amanecer, cuando ese mismo rayo de luz, el primero de la mañana, atravesaba la ventana para encender nuestras miradas.
Es de esos momentos que consideras perfectos, inolvidables, y que no podrían haber salido mejor. Despertar en medio de la nada, con lo que más importa a tu lado, sin nada más que hacer en el día, que disfrutar de la persona a la que amas, compartiendo caricias, frente al tibio abrazo del fuego.

Pero no pude hacer nada para evitarlo, poco después ella me dejó. Me robó el corazón, se lo llevó. No sé porqué, pero llegó el momento de decirme adiós, y todo acabó… sin que yo pudiera hacer nada, sin que me diera tiempo a enfrentarme al destino para que no se alejara de mi lado…

Y aquí estoy yo, un año después de todo aquello, frente a la misma chimenea, en el mismo lugar perdido, intentando seguir viviendo entre el frío y el dolor. El frío que siento porque ella no está aquí para incendiar mi corazón; y el dolor de mi alma que nota su ausencia, porque nuestras manos no están entrelazadas, y porque pese al frío, me sobra una manta de las dos…

Al menos tengo el consuelo de tenerla cerca. Ahí está, calentita en su rincón, justo encima del fuego que la consumió. Su presencia me reconforta, aunque no diga nada, aunque no se mueva, aunque no se baje de su lugar preferido sobre de la chimenea.
Siempre le hago la misma pregunta: ¿Por qué te la llevaste de mi lado? Pero no contesta; la muerte nunca tiene el valor de responder.